Cultive su propia Dionaea carnívora: ¡Fácil paso a paso!
Tabla de contenido
Originaria de Norteamérica, la especie Dionaea muscipula es muy famoso por su anatomía, es uno de los pocos capaces de realizar el movimiento de abrir y cerrar su "mandíbula".
Una de las grandes ventajas de esta especie es su tamaño, que puede alcanzar un máximo de 10 centímetros y es ideal para cultivar en espacios reducidos, como pisos y casas que no tienen jardín.
A pesar de su tamaño, suele tener de 4 a 8 hojas que se desarrollan en forma de roseta y cada una de ellas tiene unos 20 peciolos, como si fueran dientes, en la punta para colaborar en el proceso de captura de la presa.
Cómo cuidar la Dionaea
Las mayores preguntas suelen referirse a la alimentación. La Dionaea se alimenta de pequeños insectos, por lo que tiene un néctar especial que atrae a su caza.
Tras la captura, comienza el proceso de alimentación a partir de sus glándulas mediante la secreción de enzimas digestivas, que puede durar hasta 10 días.
Ver también: Árbol de jade: conozca los beneficios de tener esta suculenta en casaComo planta que vive en un clima tropical, la Dionaea requiere mucho sol, por lo que la maceta debe estar expuesta al sol directo o a media sombra.
El tipo de suelo más adecuado para el cultivo es el drenable y rico en materia orgánica, para que la planta reciba los nutrientes necesarios para fortalecerse, y los agujeros de la base de la maceta ayudan a evitar que la tierra se llene.
Ver también: Aprende a plantar narcisosAl igual que otras especies de plantas carnívoras, la Dionaea necesita que el suelo esté constantemente húmedo para desarrollarse bien, por lo que hay que vigilar siempre el riego para que la tierra no se seque, pero evitando encharcar las raíces.
Además de pequeños insectos, la dieta de la Dionaea también consiste en pequeños trozos de fruta, como manzanas y plátanos, y nutrientes del suelo, por lo que no necesita ser abonada.
Consejos especiales
Al tratarse de una planta carnívora, requiere algunas precauciones que otras especies no, por lo que hay que estar siempre alerta para poder proporcionarle el apoyo necesario y garantizarle la calidad de vida que necesita.
Durante el invierno se recomienda trasladarla a un lugar fresco y aireado dentro de casa. En primavera puede necesitar mucho sol para florecer en su mejor momento.
Por último, asegúrese de podar el tallo floral con las herramientas adecuadas antes de que alcance los 8 centímetros de altura, así evitará la floración de las plantas jóvenes y la posible muerte de la Dionaea.