Doblar, doblar, doblar: ¿cuántas veces puedes doblar una fila de papel por la mitad? ¿Una, dos, tres o cuatro? Parece sencillo y fácil, pero requiere técnica y habilidad, como dice la plusmarquista mundial Britney Gallivan.

La entonces estudiante de secundaria Britney Gallivan, de California, entró en los libros de récords en 2002 tras conseguir doblar una hoja de papel por la mitad 12 veces.

La joven cuenta que, antes de entrar en el Libro Guinness, existía el consenso de que era imposible doblar el papel más de siete veces, pero ella fue más allá de lo imposible y lo consiguió ocho, nueve, diez, once, doce veces.

Mucho más que un simple plegado

Britney no sólo batió un récord mundial, registrado en el Libro Guinness: incluso creó ecuaciones relacionadas con su habilidad.

La joven consiguió calcular cuántas veces se puede doblar un trozo de papel por la mitad en una sola dirección o en varias y lo detalló en un libro titulado "Cómo doblar papel por la mitad doce veces".

Toda esta habilidad comenzó a desarrollarse después de que el alumno se sintiera animado a realizar la hazaña en una clase de matemáticas.

Según la Sociedad Histórica del Valle de Pomona, se daría un crédito extra a quien pudiera doblar cualquier cosa doce veces, y ella lo consiguió con una hoja de oro. Así que su profesora cambió el reto por algo más grueso: un trozo de papel, lo que espoleó a Britney a batir el récord mundial.

Entonces se puso a trabajar en el problema pasando muchas horas intentando doblar hojas de papel, periódicos y cualquier otro material plano que pudiera encontrar. Al fin y al cabo, éste es el primer enfoque que la mayoría de la gente utilizaría para intentar resolver el problema.

Britney revela:

" Fue muy frustrante, ya que tuve muchos intentos fallidos de doblar diferentes papeles por la mitad. Empecé a preguntarme si todos los que habían intentado el problema antes que yo tenían razón en que doblar el papel por la mitad más de ocho veces podría ser imposible. ."

Continúa:

" No podía aceptar que el plegado por la mitad pudiera estar limitado. Sabía que tenía que cumplir el reto o entender qué era lo que limitaba la progresión del plegado ."

Tras muchos intentos, la joven empezó a darse cuenta de una lógica y desarrolló su ecuación. Descubrió que para doblar un trozo de papel por la mitad muchas veces, se necesita una hoja larga y delgada: cuanto más se dobla una hoja, más gruesa se vuelve la pila resultante, y cuando la pila se vuelve más gruesa que larga, no queda nada que doblar.

Britney encontró en Internet un globo ocular de papel de seda que medía 1.219 metros, es decir, más de un kilómetro, y la joven tardó unas ocho horas en arrastrarse por un largo pasillo de un centro comercial de California para alcanzar el récord mundial.